¿Qué tienen en común las cucarachas, las ratas, los ratones, los pájaros y los murciélagos? Todos pueden invadir las casas, las oficinas, tuberías, graneros y otras estructuras anexas, dejando tras ellos desperdicios tales como heces, orina, partes de insectos, pelos y cuerpos de animales muertos. También se consideran como vectores capaces de transmitir enfermedades o hacer daño a las personas y/o a los animales. Si usted trabaja en una situación en la que pueda estar expuesto a desperdicios de vectores (agricultura, jardinería, construcción, trabajo en bodegas de almacenaje, servicio de limpieza, etc.) asegúrese de estar entrenado para reconocer los indicios de este tipo de desperdicios y tener las instrucciones de avisarle a su supervisor para que se puedan recolectar y desechar debidamente.

Las heces, la saliva, y partes del cuerpo de las cucarachas, así como la orina de ratas y ratones contienen proteínas que pueden secarse, propagarse por el aire y causar síntomas alérgicos en humanos. Los síntomas incluyen picazón en la piel y los ojos, irritación de la garganta y la nariz, y con más exposición, asma grave. Además, algunas especies de ratones y ratas, a través de su orina, heces y saliva, propagan el virus Hanta, una enfermedad que puede causar trastornos respiratorios graves y la muerte.

Los pájaros y los murciélagos a menudo duermen juntos en grandes números. La acumulación de sus heces, cuerpos de los que mueren y otros desperdicios pueden contener ácaros, hongos y bacterias que pueden causar enfermedades en los humanos. Los síntomas de estas enfermedades abarcan desde pérdida del apetito y dolores de cabeza, hasta fiebre, debilidad muscular y dolores en el pecho.

Lo preferido es la prevención, pero cuando se encuentran desperdicios de vectores, sólo deben ser recolectados y limpiados por personas entrenadas para hacerlo debidamente y con seguridad. Si usted es responsable de recolectar y limpiar desperdicios de vectores, asegúrese de estar correctamente entrenado sobre sus peligros potenciales y tome las debidas precauciones para proteger su propia salud y seguridad. Las precauciones pueden incluir ventilar un espacio cerrado durante al menos 30 minutos, usar equipos de protección personal (PPE, por sus siglas en inglés) tales como gafas de seguridad, guantes de hule, ropa desechable de protección y botas de hule; y usar un equipo de respiración equipado con un filtro (P100) de alta eficiencia para partículas (HEPA, por sus siglas en inglés).

Evite limpiar con aspiradora, barrer, recolectar en seco o lavar a presión los desperdicios de vectores porque esto puede causar polvo que se propaga por el aire. A menudo se recomienda una limpieza húmeda suave usando una solución de 10% de lejía para empapar bien toda el área, dejándola reposar durante al menos 15 minutos. Después comúnmente se usa un paño, esponja o trapeador remojado en la solución de lejía para recolectar los desperdicios finos y para decontaminar cualquier herramienta u otros artículos afectados. Los desperdicios contaminados los debe colocar en bolsas dobles de plástico resistente una persona que esté usando el equipo de protección personal apropiado. Después dichos desperdicios se deben desechar en botes de basura designados a ese efecto. Por último, se recomienda un trapeador mojado con la solución de lejía para limpiar todas las superficies.

Una limpieza apropiada puede prevenir la diseminación potencial de enfermedades o alérgenos. Otros trabajadores que hayan quedado expuestos a los desperdicios de vectores deben tomar una ducha o lavarse las manos y la piel expuesta con jabón y agua caliente. Cualquier ropa contaminada debe lavarse en agua caliente por separado de otras prendas de vestir.