El trabajo rutinario puede entorpecer el estar alerta, y la precaución que existía cuando el trabajo era nuevo e interesante puede decaer a una actitud relajada. En muchos empleos se transita la misma ruta diariamente, por los mismos caminos, o se repiten las mismas tareas casi sin pensar. Si no existe un despertar periódico con respecto a los peligros omnipresentes, el letargo se profundiza y pueden aumentar las probabilidades de que ocurra un accidente.

Los trabajadores no siempre reconocerán la importancia del entrenamiento de seguridad, o pueden pensar que es innecesario porque han “estado haciendo esto durante años”. Pero un beneficio importante de un entrenamiento periódico de seguridad es el recordatorio de que pueden existir peligros y que nadie es inmune a los accidentes. Por lo tanto, es importante que los empleados entiendan el propósito de las sesiones de entrenamiento, por qué les serán útiles, y las posibles consecuencias de no obedecer las reglas y procedimientos de seguridad.

El entrenamiento de seguridad deber organizarse de manera que se presente el material en el mismo orden de los pasos que se deben tomar en el trabajo. Asegúrese de que cada trabajador entienda el material de entrenamiento; no sólo que se encuentren presentes o que tomen el examen. Insista en que los participantes en el entrenamiento hagan preguntas después de la sesión para indicar lo que han entendido y lo que no han entendido. Esto indica lo que hay que repasar de nuevo. Si existe una falta de comprensión general en cuanto a los peligros o las reglas y prácticas de seguridad, se debe programar otra reunión de seguridad, o un curso de repaso en fecha futura.

Los empleados deben ser capaces de aplicar y poner en práctica de inmediato sus nuevos conocimientos y habilidades. Si los empleados no entienden la información proporcionada en el entrenamiento de seguridad, dicho entrenamiento no ha sido efectivo. Debe saberse de inmediato si los trabajadores están haciendo su trabajo de forma segura o no. Los supervisores deben observar a los empleados mientras hacen sus tareas y hacerles preguntas para identificar lo que saben y lo que no saben.

La mayoría de estas recomendaciones son relativamente simples, y las soluciones no son costosas; pero los beneficios de seguridad pueden ser enormes. Recuerde, el entrenamiento sólo es efectivo si los empleados lo entienden, y usan lo que han aprendido. Toma menos de un segundo para perder la vida.