Los trabajadores de atención a la salud en el hogar proporcionan un valioso servicio a los clientes que requieren dicha atención, así como ayuda con las tareas básicas de la vida cotidiana. La amplia variedad de tareas y ambientes de trabajo que se encuentran en este ramo requieren pensar sobre los hábitos de trabajo, las actividades y la seguridad.

Capacítese para entender claramente las tareas que deberá ejecutar y los equipos que necesitará usar. Si tiene alguna pregunta acerca de la seguridad de un procedimiento, cliente, o localidad, pregúntele a su supervisor. Reporte los accidentes o lesiones para su inmediato seguimiento. Contacte a su supervisor para corregir cualquier peligro en la casa del cliente, responder a algún comportamiento inapropiado del cliente o conseguir las herramientas que usted necesite.

Evalúe los peligros de la casa del cliente. El buen orden y aseo ayudan a prevenir los resbalones, los tropezones y las caídas. Una iluminación adecuada le ayuda a ver lo que está haciendo. Evalúe el vecindario con respecto a su seguridad, presencia de crimen, iluminación exterior, etc. Conozca la ubicación de las salidas, los detectores de humo, los extintores de incendio, teléfonos, etc. Platique, tanto con su supervisor como con su cliente, sobre las armas de fuego u otras armas que puedan estar presentes en la casa del cliente. Pídale al cliente que saque las armas de la habitación mientras usted esté presente si su presencia es desagradable para usted.

Los peligros que presentan los animales incluyen mordidas, arañazos y alergias. Es fácil tropezar con un animal doméstico si éste se acuesta detrás de usted o en su paso cuando usted no lo espera. Algunos animales se pueden tornar agresivos si usted se acerca a su cliente y comienza algún tratamiento. Mientras usted esté en el sitio, los animales deben estar encerrados en otra habitación si es posible.

La atención a la salud en el hogar es una tarea exigente. Hacer las camas, alimentar y mover al cliente, hacer tareas de aseo y lavandería, y transportar suministros pueden causar torceduras o distensiones si no se hacen correctamente. Mantenga la espalda recta cuando haga sus tareas o cuando levante algo pesado. Si puede, acerque su trabajo al cuerpo y trabaje a una altura confortable. Para su propia seguridad, platique con su supervisor y con el médico del cliente para planificar como levantarlo, y obtenga dispositivos de ayuda tal como sillas con deslizadores, mantas, sillas de ruedas, poste para izar y equipo completo para izar al cliente.

Capacítese en el uso de los equipos de protección personal —y haga uso de los mismos— tales como guantes, una bata y protección para la cara y los ojos, que ayuden a prevenir el contacto de su piel y membranas mucosas con la sangre, fluidos corporales y excrementos del cliente. Use una mascarilla sobre la cara para prevenir la exposición a enfermedades que se propagan por el aire. Lávese las manos con frecuencia. Limpie y esterilice las superficies de trabajo y practique el buen orden y aseo en cuanto a los excrementos y materiales contaminados. Use y deseche correctamente los objetos filosos. Reporte de inmediato cualquier exposición o pinchazo de aguja y haga seguimiento con un médico.

Algunas sustancias químicas, medicinas y drogas intravenosas pueden ser peligrosas si le tocan la piel, si las respira o si las usa incorrectamente. Use solo limpiadores diseñados para uso en el hogar; lea y obedezca las instrucciones. No use materiales guardados en recipientes sin rotular; usted no sabe qué son ni conoce cuál es su concentración. Maneje con cuidado los equipos de oxígeno, ya que pueden ser un peligro serio de incendio. Mantenga todas las fuentes de llamas alejadas del oxígeno. No permita que nadie fume en la misma habitación. Guarde los tanques de oxígeno en posición vertical, sujetos a un carrito o a la pared, y en áreas bien ventiladas.

Esté consciente de lo que le rodea para su propia seguridad. Mantenga cerradas y ponga el seguro de las puertas y ventanillas de su auto. No traiga objetos de valor al trabajo, o déjelos en su auto. Lleve un teléfono celular pre-programado con los números de teléfono locales para emergencias. Usted no debe tolerar ataques verbales, amenazas ni ataques físicos. Aléjese de la situación si no se siente seguro, notifique a su supervisor y pida ayuda de emergencia si se requiere.